Cuando Sabrina y Diego vinieron a verme no lo hicieron solos. Lo hicieron acompañados de Santi y Geor, que son también fotógrafos de bodas en Castellón, y primos de Sabrina. Como ellos no querían que sus invitados estuvieran liados con las fotos y tuvieran que trabajar, les pidieron a Santi que les recomendara algún fotógrafo de bodas en Castellón, y así es como llegaron a mi.
Y llegó el día de la boda, y en casa de Diego nos presentamos Ezequiel y yo mismo. Tras un ratito jugando con Pepa, la mascota de la casa Diego entró a vestirse de novio como mandan los cánones. Su traje es un Giovanni Valdi de La Subasta.
Sabrina nos esperaba directamente en el restaurante, donde se celebraría la boda y se alojarían esa noche. Las habitaciones de Mas de Lucía nos dieron mucho juego pues son amplias y muy bien decoradas e iluminadas. Además, gracias a un olvido de última hora – ¿Y el cancán? – tuvimos un buen rato extra para hacer más fotos por todas las habitaciones. Así que hay fotos del vestido de novia de Sabrina desde todos los ángulos -un Femme, de la colección Very Chic de Cymbeline – , comprado en la tienda Tiara Ceremonias de Castellón.
Los zapatos, unos Doriani, del maquillaje se encargó Raquel de Libano de Mandala y las flores son de La rosa blanca. Sol du’art quartet amenizó con su música el aperitivo, aunque debido al retraso apenas los pudimos disfrutar.
Aquí veis uno de esos momentos que me encanta fotografiar. Estos nervios que no pueden contener la risa también merece la pena ser captados, y así a Sabrina nunca se le olvidará ningún detalle de esos momentos de alegría y nervios.
